No
suelo explicar las imágenes desnudas de sentido que envuelven mis dibujos
pasados, ni los presentes tampoco.
Pero
hoy haré un “Stop” en mi proceso de trabajo, y les daré la angustia de tratar
de que me entiendan o al menos a mis trabajos (mis hijos)
Se
ha catalogado de cierto modo a mis últimas producciones como obra
Hiperrealista, (y algo de eso hay) es un tratamiento muy minucioso, obsesivo y
de carácter superfigurativo, sobre todo en los pasajes sutiles y las claves
tonales utilizadas. Aún así no me gustan.
¿Por
qué la figuración de índole realista? Porque la realidad apesta. Y aunque suene
irónico, no lo es, ya que utilizo el discurso de la realidad para burlarme de
ella, quitarle el contexto narrativo, desnudándola en mi papel, dejando sólo
una idea de momento y de sensación.
Una
gran mentira, porque no es real lo que vemos, no posee tridimensión, y es allí
donde se concentra la broma, el chiste, la sutil angustia y el “lerolerismo”
(palabra que acabo de inventar devenida del "lero -lero") hacia los acontecimientos que vivo o recorto de
la oscura realidad, (sí, bastante
absurdo y sin sentido a primera vista, teniendo en cuenta que las acciones de los
protagonistas de los dibujos no parecen muy angustiosas)
El
arte que es luz y nos guía por el camino, nos rodea a cualquier instante, y no
suelo autodenominarme artista, pero en medio de tanta oscuridad que me rodea
estoy tratando de encender una vela, realizo “chispas” en aquella habitación
oscura, y el tiempo dirá si lograré encender
aquella vela.
No
suelo pensar demasiado en el material a utilizar para la realización de un
dibujo, tampoco en la imagen que recorto de la realidad, ya que es siempre
producto de mi subjetividad y experiencia, de la cual nadie puede escapar,
(osea, pensando o no, el resultado será una imagen daroniana, de eso estoy
seguro)
Suelo
concentrarme sobre todo en si estoy en el camino correcto, si estoy siendo fiel
a lo que considero ético y en base a mis principios, decir la verdad, hacer
justicia de forma poética, con desplazamiento simbólico y sobre todo … sin
tener que ejercer violencia contra alguien para expresar libremente lo que yace
en mi espíritu.
Estoy
feliz en el momento de dibujar o comenzar un proyecto nuevo, y no hay grandes
misterios, es simple, lo más importante que tengo para conmigo mismo es el
dibujo, incluso mi vida llega después de esto, en otras palabras, vivo por el
dibujo, es por ello que sin importar mucho que me suceda continúo dibujando.
EL
ARTE ME SALVÓ LA VIDA.
Y
es por ello que ahora es él quien me guía, con mi vida detrás, si he de sufrir
mucho (osea, vivir mucho) que sea solo por el arte y nada más.
Al
momento de crear a veces uno se angustia, pero es hermoso saber que puedes
incluso tomar como arma esa sensación, incluso la incapacidad o la impotencia
de que no salga lo que uno quería (es algo que creo que sólo sucede en el arte)
El
arte es nada, porque está en todos lados, como la luz, porque incluso la
oscuridad es un atributo de energía y
por sí sola se define por la ausencia de la preciada luz (algo en que pensar)
Cuando
me doy cuenta de que terminé un dibujo, las únicas cosas que pienso son, “que desastre” y después en
qué pensará la gente al verlo, y gracias a Dios siempre recibo elogiosas críticas
por lo general, y creo que eso debe ser bueno, no creo ser un maestro , ni un
grande, mucho menos un genio, creo que lo que hago tiene un cierto nivel, (que
no me gusta) pero sé que tengo mucho por aprender y sigo haciéndolo, no llegue
a donde quiero llegar, aún falta, así que … como dirían mis adorados de-moños Les
Luthiers, todo esto… “SIGUE SIGUIENDO!!!”
Albriquias!
Alegratas! Me late el Cardiotripa!
(Es
todo por hoy)
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